Regreso tras la pandemia
Casi dos años tuvieron que esperar para volver a ensayar juntos. Finalmente, en abril, representaron el musical de ABBA. Mereció la pena. Lo hicieron primero en Villanueva de la Cañada; después, en mayo, en Villanueva del Pardillo.
Y luego, casi sin esperarlo, llegó una nueva invitación: Boadilla del Monte, donde actuarán el próximo domingo, 13 de noviembre, y para el que ya han agotado las entradas.
Todo esto está muy bien, les digo, pero sigo sin tener claro una cosa. Estamos hablando de teatro, de teatro musical, que requiere vestuario, atrezo, decorados. Eso, ¿quién lo hace?
—Bueno, el que sabe coser, cose, y el que sabe pegar, pega —dice Rafa entre risas—. Es opcional, cada uno hace lo que quiere y puede.
—Es el director de la obra el que reparte los papeles —puntualiza Sally—. Los chicos, normalmente, se encargan de los decorados y las estructuras porque requieren fuerza. Conchi, que es una manitas, hace los vestuarios y el atrezo.
Y amigos, maridos, cuñados, primos… Porque como ha ocurrido en Boadilla, a veces se encuentran con que los escenarios no reúnen las condiciones idóneas y hay que echar mano de la familia y las amistades.
—Si tienes un amigo que sabe de sonido, le llamas y le pides el favor —dice Rafa.
En realidad no son favores. Ellos lo ven como una forma de ayuda mutua, de generar, al fin y la cabo, comunidad. Una forma divertida y gratificante. Solidaria. Y muy exigente. Preparar una obra les supone un curso escolar. O dicho de otro modo más explícito: ensayos de hasta cuatro horas los sábados por la tarde. Y los domingos, si la representación está cerca.
Preparar una obra les supone un curso escolar, con ensayos de hasta cuatro horas todos los sábados
—Si nos subimos al escenario es para hacerlo bien —dice Sally— Aquí todo el mundo baila, todo el mundo actúa, todo el mundo canta. Y si no canta hace playback. Eso lleva mucho tiempo.
Hay casos, como fue el primer año de La Cenicienta, en que tuvieron que preparar la obra en solo tres meses. Acababan de firmar el convenio con el Ayuntamiento y este fijó la fecha de la representación en Navidad. ¡Estaban en septiembre!
—A veces es duro. Compaginar la familia, el trabajo… —dice Conchi.
La directora entonces fue ella. Ahora es Natalie, la hija de Sally.
—Para La Sirenita hemos convencido a Carlos, el marido de una de las integrantes del grupo.
Up’s! no para. Ahora representan Mamma Mia!, pero preparan ya La Sirenita Rock (se han comprometido con el Ayuntamiento para representarla en octubre de 2023). Y una nueva Cenicienta.